Referentes teóricos en torno al debate memoria, historia y oralidad, constituye el resultado de un proyecto de investigación, redacción académica y divulgación científica, orientado al desarrollo de una metodología alternativa, dirigida a...
moreReferentes teóricos en torno al debate memoria, historia y oralidad, constituye el resultado de un proyecto de investigación, redacción académica y divulgación científica, orientado al desarrollo de una metodología alternativa, dirigida a investigadores de las ciencias humanas y sociales, con la cual se reivindica un aspecto importante del conocimiento de lo social que es la propia experiencia humana, la subjetividad como fuente del conocimiento, y el relato de los distintos actores, ya sea de procesos sociales, de elementos puntuales de fenómenos sociales, como punto de referencia para construir el conocimiento de lo social. (Ferrer, 2023a, b)
El mismo tuvo como centro el análisis de los referentes teóricos en torno al debate memoria, historia y oralidad. Como caminos específicos, se fundamentó en el examen del marco referencial en torno al debate de la memoria; el reconocimiento del marco teórico existente en torno al debate de la historia; y la exploración del conocimiento referencial en torno al debate de la oralidad; logros que derivaron en un estudio cuyas evidencias representan una peculiar forma de ver el cosmos, la realidad y al hombre, producto de un momento histórico, político, social, cultural en el que encuentra su legitimación y en el que funciona como conglomerado.
Como teoría de entrada que expone el objetivo de estudio se consideró la Teoría de la Representaciones Sociales de Serge Moscovici (1979), cuya aplicación ha pasado del concepto a un desarrollo teórico que ha permeado las ciencias humanas y sociales al incorpora una nueva unidad de enfoque que relaciona e integra lo individual y lo colectivo, lo simbólico y lo social, el pensamiento y la acción, constituyéndose en una explicación útil para el estudio de la construcción social de la realidad. En atención a los objetivos propuestos la investigación contempla la revisión de literatura especializada en el campo de la memoria, Yerushalmi (1989), Ricoeur (1999) y Halbwachs (2004); historia, Nora (1998) y Ricoeur (1999); oralidad, Thompson (1988), Fraser (1993) y Vilanova (1998).
Desde la perspectiva epistemológica para el acceso y construcción del conocimiento, el estudio se adscribe al enfoque Racionalista-Deductivista, Padrón (1998, 2013), y metodológicamente se ejecutó a través de una investigación documental con diseño bibliográfico, Palella y Martins (2006) y Suárez (2007). El proyecto se adscribe a la línea de investigación “Representaciones, actores sociales y espacios de poder” del Doctorado en Ciencias Humanas de la Facultad de Humanidades y Educación de la Universidad del Zulia, conjuntamente con la línea de investigación Desarrollo Cognoscitivo y Creación Intelectual, del Doctorado en Gestión para la Creación Intelectual, Programa de Estudios Avanzados de la Universidad Politécnica Territorial de Mérida “Kléber Ramírez”.
Su relevancia radica en el concepto de representaciones sociales, el cual constituye una forma de pensamiento social que surge en un contexto de intercambios cotidianos de pensamientos y acciones sociales entre los agentes de un grupo social, razón por la que hoy día constituye uno de los enfoques clave para el estudio de los fenómenos sociales, a través de su transformación o construcción, porque en el proceso de representación, los sujetos interpretan la realidad y esa interpretación está mediada por los valores, religión, necesidades, roles sociales, y otros aspectos socioculturales, de manera que se asocia al lenguaje y las prácticas de un determinado grupo social. A la par que refleja la diversidad de los agentes o actores y la pluralidad de sus construcciones simbólicas, con las que promueve el pensamiento colectivo y la reflexividad de los grupos.
En este orden de ideas, las representaciones sociales de la memoria son actitudes prácticas, cognitivas y afectivas que prolongan de manera irreflexiva las experiencias pasadas en el presente; por su parte las representaciones sociales de la historia, tienen la función de explicar a un grupo social, la conformación de su realidad y justificar las actitudes y conductas ante los desafíos del presente; así mismo las representaciones sociales de la oralidad, privilegian el análisis de lo social, de la cultura y de las interacciones sociales, permitiendo focalizar la comprensión en las producciones simbólicas y sus significados haciendo uso de distintos tipos de testimonios verbales que sirven para conocer el pasado.
Es por ello que se establece una vinculación teórica entre representación social y las categorías de memoria, historia y oralidad, sus descriptores y la concepción que cada una de ellas establece sobre memoria colectiva, a partir de un elemento común, las prácticas sociales que vinculan el pasado y el presente, otorgándole continuidad a un universo de significados, valores y narraciones que explican a un grupo social la conformación de su realidad.